ALHAMBRA
Construye la mejor obra arquitectónica con la que no tendrás rival y ganaras la partida. Cuanto mas edificios hagas más cerca tendrás la victoria.
Nuestro objetivos será crear la construcción más completa del mundo (con la mayor cantidad posible de todos los tipos de construcciones) que nos de muchos puntos (no diré bonita porque mi especialidad es hacer una cosa horrible, pero que da muchos puntos).
Tendremos seis tipos de edificios, cada tipo oscilara entre unos precios fijos y serán de un mismo color. Por supuestos, los edificios más baratos darán menos puntos. También conseguiremos puntos por la muralla más larga que tengamos.
Tendremos un “mercado” con 4 fichas a la venta: cada una de ellas se pagará con un tipo (color) de moneda y tendrá un valor que vendrá indicado en la misma fichita del edificio. Debemos tener cuidado de no confundir el color de la edificación (hay 6) con el color del dinero con el que tendremos que pagar (solamente hay 4 colores de moneda). El dinero lo podremos al lado del lugar donde están las fichas en venta: tendremos 4 cartas bocarriba y de ahí cogeremos.
En nuestro turno podremos:
Coger cartas de dinero. Podemos coger una carta o bien, tantas cartas como queramos, independientemente del color, siempre y cuando el resultado sea 5.
Comprar una ficha de edificio del mercado y bien colocarla o dejarla en nuestra reserva para posteriormente colocarla.
Recolocar las fichas de nuestra edificación.
Si a la hora de comprar un edificio pagamos con la cantidad exacta ganamos un turno extra.
Tras esto, y solo después de terminar tu turno. Se reponen las cartas y las fichas hasta tener de nuevo cuatro y cuatro, y pasa el turno al otro.
Las fichas de edificación vendrán dentro de un saco para así sacar las edificaciones al azar totalmente.
A lo largo del juego tendremos 2 recuentos de puntos, situados al azar. Son dos cartas especiales que indican que se tiene que realizar el recuento y se encontraran dentro del mazo de monedas. Barajaremos las cartas de dinero, le daremos a cada jugador un mínimo de 20 monedas (monedas que no cartas), situaremos las cuatro que necesitamos para comenzar y tras esto, dividimos el mazo que nos queda en 5 partes y situaremos el primer recuento al azar en el segundo montón, y el segundo recuento al azar en el cuarto montón. Montamos el mazo de nuevo y ya estamos listos para empezar a jugar.
Además del dinero, le damos a cada jugador la pieza central representada por una especie de patios de los leones y listos para comenzar. Empieza a jugar aquel que haya recibido menos dinero inicial.
El juego termina cuando ya ningún jugador puede comprar ninguna de las losetas del centro, o no pueda colocarlas. En ese momento se hace una venta final y el jugador con la mayor cantidad de monedas de cada color se lleva la plaquita correspondiente. Se hace el recuento final y aquel con más puntos gana.
La cantidad de puntos que recibiremos dependerá de si nos encontramos en el primer o en el segundo recuento o al final del juego. Las murallas siempre puntúan igual, 1 punto por casa muralla exterior, es decir, solo cuentan las que están en el exterior de nuestra construcción, por lo que no nos interesa construir muralla en el interior, aunque es inevitable.
Si solo sois 2, el juego añade a Dirk, un jugador fantasma. Dirk se llevará 6 losetas al principio del juego, 6 tras realizar el primer recuento y 1/3 de las losetas que hay en la bolsa, tras el segundo recuento. Dirk suma puntos por las construcciónes igual que cualquier otro jugador, pero no sumara puntos por las murallas. En el momento de comprar una loseta, el jugador podrá también regalarle la loseta a Dirk para que este la añada a su construcción y así fastidiar al otro jugador.
Lo malo de añadir a Dirk es que da una rabia terrible cuando te gana (si, nos ha pasado, somos así de paquetes). Lo compramos sin saber nada de él, solo porque estaba ambientado en Granada y actualmente no nos arrepentimos de que forme parte de nuestra colección. Si te lo explican (las reglas dejan un poco que desear), no tardas ni una partida en pillar que debes ir haciendo. Un juego muy fácil de aprende y muy divertido de jugar.
Las reglas son horripilantes pero un muy buen juego. Partidas breves que se hace agradable. Con dos jugadores sigue dejándose jugar muy bien, añádiendo la estrategia de Dirk. Lo malo, los edificios verdes SIEMPRE los intento comprar con dinero verde. No entiendo por qué mi cerebro funciona tan mal. Muy buen juego al que desconsideramos por un tiempo.
Un juego con más complejidad de la que aparenta. Debes ir vigilando a tus oponentes para conseguir salir beneficiado en cada una de las puntuaciones y llevarte el trofeo final.
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